¿Odio a los lunes?
Si nos acercamos a San Google y hacemos una búsqueda tan simple como “odio lunes” o “heat mondays”, pronto descubrirás que a pesar de las diferencias culturales, de idiomas o edad tienen al menos una causa común: el odio hacia el primer día de la semana. Lunes es para la mayoría sinónimo de la vuelta a la rutina, dejar atrás los días libres y la diversión propia del fin de semana.
Para mí y para la mayoría de mis compañeros erasmus era exactamente igual, pero este hecho cambió radicalmente al llegar aquí. Los lunes han pasado a convertirse en casi el mejor día de la semana. Os explico por qué.
Después de la paliza de viernes y sábado, la mayoría de los domingos no se sale; por eso el lunes te levantas, vas a clase (sin resaca), aprovechas bien el día y aunque te prometiste no salir hasta el jueves, te sientes tan bien contigo mismo que dices: bueno una cerveza al Morrison´s 1 y para casa. ¡Mentira!
Morrison´s 1 o Morrison´s Opera es una especie de pub irlandés-húngaro, no muy grande pero bastante acogedor; donde tienes futbolín y karaoke. Esto podría ser suficiente para decidir ir a tomar algo, pero lo cierto que el reclamo principal es su ofertón. Hasta hace poco la entrada era gratuita y entre las 9 y las 12, conseguías el tercio de Heineken por unos 35 céntimos. Después de que la armada española decidiera montar su campamento oficial en Morrison cada lunes, se han dado cuenta que podría sacar algo más de rendimiento y nos han subido los precios. ¡Vaya escándalo!
Ahora pagamos 1,70 euros por entrar y 75 céntimos por cada tercio. Hemos estado al borde de la huelga o boicot pero si realmente lo piensas bien, sigue siendo muy barato. Por eso, seguimos fieles a nuestra cita de los lunes. Donde después de la primera media hora, ya te convences de que no vuelves a casa y comienzas a buscar en la lista del karaoke alguna canción con la que puedas chapurrear o que al menos tenga un estribillo conocido y fácil.
Después de sacar el artista frustado que todos llevamos dentro y quedar un poco en ridículo en frente de los profesionales del karaoke, la decisión es unánime. Son las 12, ya no es rentable; próxima parada: Kuplung.
Kuplung es un pub que está a tan solo 5 minutos andando. Un sitio realmente currado, bastante bonito y donde los lunes todo está al 50%: copas por 2 euros y cerveza de medio litro por 1 euro. Además Kuplung, tiene un sala de conciertos, donde los lunes siempre hay algún dj amenizando la velada. He de decir, que si pasamos lista, a Kuplung no llega ni la mitad de los que estábamos en Morrison´s, pero esos pocos valientes tiene diversión asegurada. A las 2 aproximadamente las bajas ya se cuentan por decenas, porque al día siguiente hay clase y hay muchos buenos estudiantes que se levantan (a saber cómo) y hacen acto de presencia en la universidad.
Creo que nadie podrá juzgarnos por salir de fiesta un jueves en plan “tranqui” aunque sea lunes, es que hasta te duele quedarte en casa. Tenemos que salir, hasta mi madre lo entiende.
Sabía que un año de erasmus me aportaría muchas cosas, pero nunca imaginé que el odio profundo que profesaba a los lunes no solo se apaciguaría, sino que cambiaría de una forma tan radical. Odio a los lunes? Vivan los lunes!