Mi ordenador ha muerto
Durante tu estancia erasmus, además de cosas buenas, pueden pasarte MUCHAS cosas malas (que te atropelle un coche, que te quedes a vivir allí, que te dé un coma etílico…), pero lo peor que te puede pasar (incluso peor que morir) es quedarte sin ordenador.
Algunos dicen que ha sido un virus, otros que instalé un plug-in que no funcionaba bien, hay gente que insinúa que mi disco duro ha muerto y mi novio piensa que fue el karma. La historia es que, causas aparte, ayer por la mañana mi portátil dijo «Hasta aquí hemos llegado, Filomena«. Y me dejó tirada, sin más, como se tira un kleenex sucio a la basura.
Después de 10 horas llorando, de rezarle a todos los dioses que conozco y de seguir las instrucciones de los mejores informáticos del mundo, llegué a la conclusión de que no hay más remedio que formatear. Sí, habéis oído bien, FORMATEAR. Borrarlo todo (fotos, música, videos, documentos…) y empezar de nuevo (reescribir todos esos trabajos tan complejos para la universidad… JA, JA, JA). Pero, ¿cómo hacerlo sin los cedés? Gracias a que el mundo no es tan malo conmigo, y a que el martes próximo es mi cumpleaños, una visita se viene sinmaletas pero con los cedés bajo el brazo.
Así que, como regalo adelantado de cumpleaños, mi portátil me ha entregado casi una semana entera de descanso. Se acabó el día en el Twitter o investigando #acampadasol, se terminó el pinchar y requetepinchar en el «más recientes» del facebook, ya no habrá más revisiones de correo cada veinte minutos ni más capítulos de The big C con los que acabar lloriqueando, ¡SOY LIBRE!
Pero pese a que ahora mismo todo es alegría y alboroto, debo avisaros, queridos (futuros) erasmus, que esto sólo tiene gracia durante una o dos semanas. EN ABSOLUTO es llevable durante 6 ó 9 meses. Así que, queridos míos, según lleguéis a vuestra ciudad erasmus, fichad bien dónde están las tiendas de reparación de ordenadores por si tenéis que salir corriendo de vuestra habitación con el cable colgando en busca de algún sitio en que os vuelvan a poner en contacto con el mundo.
Yo moriría sin ordenador. Así de simple!