¿10 euros? You’re a rich bitch, my friend!
No os voy a engañar. El dinero en el ERASMUS vuela, desaparece, se desintegra. Llega el día 15 y ves que te quedan unos 50 euros para lo que queda de mes. ¡Heart attack! Nunca sabes en qué se te va, si en fiesta, en compras, en el día a día, pero siempre tienes menos de lo deseado. A pesar de esto, Oporto tiene una muy buena característica: es barato. Y eso, queridos amigos, es clave para poder vivir 15 días con 50 euros. Si tienes 10 euros, puedes hacer muuuuuuchas cosas, leed, leed.
Plato del día en el restaurante de debajo de casa: 3’5€
Pastel de nata en las cafeterías o mercados: entre 0’5 y 0’9€
Café con leche: entre 0,8 y 1€
Cervecita de fiesta: desde 0’5 hasta 2€ (nunca más)
Billete de autobús: 1’85€ (Adiós los 10€, así que mejor caminar ;))
Un desayuno con café y bollería: 1’5€
Sandes de pernil con queijo de Casa Guedes: 3’9€
Francesinha: entre 5 y 12€ (cuanto más sencillo el local, tipo chigre asturiano, más barato y muy rico)
Entonces, recapitulemos: Os despertáis en vuestro apartamento/hostal/loquesea de Oporto, y os vais a una confitería cercana (encontraréis una cada 100 metros) y os pedís un desayuno -galão con torradas, por ejemplo, ñam,ñam–> 1’5€. Pasáis la mañana paseando por la ciudad, de arriba para abajo, sin necesidad de coger un bus, cuánto mejor callejear. Igual os apetece tomar algo antes de comer, por ejemplo, un martini. ¡Error! Aquí no hay tradición de vermú, para ellos es como si fuese un orujo, te lo sirven en chupito y sin hielo… Y te cobran entre 2 y 4 euros por eso. Recordad, martini no. Pediros una caña por 1€ en la Praça dos Poveiros, por ejemplo. –> 1€ (Si os apetece estiraros y lleváis una moneda de un euro junto al billete de 10 en la cartera, si no, pues a sentarse a la ribera del Douro bajo el puente de Luis I a ver la vida pasar. Cuando os empiecen a sonar las tripas, os acercáis al restaurante de debajo de mi casa y os pedís un plato del día por 3’5€ -o buscáis algún otro del estilo, que seguro que buscando, buscando, aparecen a montones-. También es muy típico encontrar menús por 4’5 o 5€. Por la tarde, podéis acercaros a los jardines del Palacio de Cristal, que son gratis, sentaros por ahí a charlar y volver a ver la vida pasar; o podéis cruzar a Vila Nova de Gaia por la parte de arriba del puente -maravillosas vistas-, bajando por las callejuelas -cuestas mata espinillas-, y paseando por la Ribeira, viendo al otro lado todo lo que Oporto ofrece. Para cenar, un menú de francesinha con fino (la caña española) por 5€.
Conclusión: te has hecho un día de turisteo top por 10€. Y si no, pues siempre puedes cambiar y cenarte unos bocatas del súper y pagar 3€ para subir a la Torre de los Clérigos, por ejemplo. O comer de súper y cenarte la típica francesinha, y beberte una buena caña en Piolhos. Eso siempre dependerá de tus prioridades 😉
Lo que está claro es que Oporto no es una ciudad cara. Los supermercados son baratos, el día a día es barato, la fiesta también. Sigo preguntándome cómo es que a mí el dinero me desaparece tan rápido…
Siendo el dinero la razón que normalmente frena las ansias de viajar, ¿qué excusa me podéis poner ahora? ¡Vengan todos a disfrutar de Oporto! 🙂